La Junta Electoral del Partido Justicialista nacional rechazó la lista de Ricardo Quintela, quien pretende competir contra Cristina Kirchner por la presidencia partidaria. Luego de impugnaciones y reclamos a la nómina del gobernador de La Rioja, sus apoderados habían solicitado que se oficializara su candidatura, lo que este domingo negó la junta electoral. Al mandatario provincial no le quedan instancias de apelación dentro del partido, por lo que recurrirá a la Justicia federal.
En una resolución que lleva el número 6 y se publicó a las 18.30 de este domingo, la junta ordenó “no oficializar la lista ‘Federales, un grito de corazón’ por no reunir los requisitos reglamentarios”. Además, rechazó las recusaciones a la composición del organismo electoral partidario que habían presentado los apoderados de la lista de Quintela, Jorge Yoma, Daniel Llermanos y Sandra Vanni. Entre otros puntos, habían acusado a la junta de actuar con parcialidad en favor de la lista de Cristina.
El contraataque del outsider empedernido
La junta electoral del partido es presidida por Armando Cabrera, un diputado provincial formoseño leal al gobernador Gildo Insfrán. “Se agotó la instancia partidaria”, subrayó a LA NACION una fuente que conoce la dinámica electoral interna del peronismo.
Luego de un fin de semana en el que Quintela recibió rechazos de la junta a los avales de su lista (a lo que se sumaron dos renuncias de candidatos propios, de la provincia de Tierra del Fuego), los apoderados de la nómina habían recusado a la junta, reclamado que se suspendieran “todos los plazos y trámites” del proceso electoral, y solicitado que se convocara a las partes en disputa para “acordar la conformación de una nueva Junta Electoral con representación igualitaria”. Además, habían advertido que recurrirían a una “apelación judicial” contra “la resolución N°5″ (que menciona que a la nómina le faltan 13.714 avales, entre otros cuestionamientos), y solicitaban la oficialización de la lista.
Los apoderados de Quintela habían señalado que la Junta Electoral obró con “manifiesta parcialidad” para “facilitar la oficialización de la lista contraria” y “proscribir” la del riojano. La junta contestó que recibió todos los recursos “dentro y fuera de los plazos” y siempre resolvió “por unanimidad”. También, habían criticado que los padrones no estaban actualizados, a lo que los integrantes de la junta contestaron que “el padrón fue provisto por la Justicia Federal Nacional con competencia electoral y no fue confeccionado por esta Junta”.
La junta le había otorgado plazo hasta las 11 de este domingo a los apoderados de Quintela para que subsanaran las inconsistencias que se les endilgaban, pero no se concretó ninguna presentación. “Vencido el plazo dado en la resolución de marras impugnada, el que operó a las 11 hs. del presente, y no habiendo recibido esta Junta Electoral la totalidad de la documentación solicitada, es que debe proseguir el trámite electoral en curso, por cuanto es necesario realizar el acto que corresponde a esta etapa, no oficializando la lista ‘Federales, un grito de Corazón’”, se planteó en la resolución de esta tarde.
La junta peronista tiene 15 integrantes. Según pudo saber LA NACION de fuentes partidarias, la resolución que dio de baja la lista de Quintela se tomó con 13 votos a favor y uno en contra (el de la diputada Hilda Aguirre “Beba” de Soria, aliada de Quintela). Hubo un ausente.
El organismo partidario aclaró en su resolución que el plazo para presentar listas vencía el 19 de octubre. “La Junta facilitó la participación de la lista en la competencia electoral, dándole un tiempo extra para cumplir con una exigencia”, se subrayó en la resolución. Además de rechazar la lista del gobernador de La Rioja, se definió “no suspender el curso de este proceso electoral”.
Quintela viajará este lunes a Buenos Aires y analizará los pasos a seguir, aunque desde su sector ya adelantaron que prevén judicializar el conflicto justicialista. La presentación terminará ante el juzgado federal de María Servini, la magistrada con competencia electoral nacional en la ciudad de Buenos Aires, aunque primero los apoderados de Quintela la llevarán a la junta partidaria, que luego debería acercarla al juzgado. “Vamos a pedirle a Servini que intime al Partido Justicialista a realizar su proceso electoral interno en 120 días, antes de que venza el mandato de las actuales autoridades, que garantice la participación de los 3 millones de afiliados peronistas. No nos dejaron votar. Claramente, nos proscribieron. Impidieron que el pueblo peronista se exprese”, afirmó a LA NACION Jorge Yoma.